Conversaciones
Lucila Hornstein, alumna de Vivan las Ideas
Dialogar es ayudarnos mutuamente a sacar las verdades que llevamos dentro. Escuchar las verdades del otro para dudar de nuestras certezas y parir verdades nuevas.
Lo terapéutico de las conversaciones es lo cooperativo con el otro en el mundo exterior y con nuestros otros en el pensamiento.
Todas las conversaciones tienen una retórica, un sentido común compartido, una dirección argumentativa que da sentido al rumbo de la misma, que ¨esconde el objetivo¨ no siempre consciente.
Lo importante para tener una buena conversación es estar presente con todos los sentidos, la atención es nuestro don más preciado, escuchar es mucho más difícil que hablar. Si no estoy interesado en aprender algo del otro no va a ser una buena conversación. Hay que aprender a gestionar nuestro ego.
Para encarar conversaciones difíciles es importante tener en claro y aclararle al otro que atravesar ese momento difícil va traer ganancia para ambas partes, para esto se necesita trabajar primero la confianza, el respeto, dejar de lado las certezas hasta escuchar las argumentaciones del otro, manejar el tono, no rotular y visibilizar los puntos en común dado que los acuerdos suelen ser muchos más que los desacuerdos y ponerlos sobre la mesa como punto de partida ayuda a empatizar.
Lucila Hornstein